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Mario Emilio Dihigo Llanos

Médico y pedagogo cubano. Fue miembro de importantes instituciones, como la Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de La Habana. Reveló un concepto amplio de la docencia y la maestría pedagógica.

Nació en Cidra, Matanzas, Cuba, el 8 de agosto de 1895.

Comenzó a estudiar el bachillerato en el Instituto Segunda Enseñanza de Matanzas, lo continuó en Pinar del Río y lo terminó en La Habana, en 1912. Se graduó de Doctor en Medicina y Cirugía en la Universidad de La Habana, en 1917 y ejerció durante 38 años la profesión de Médico. Durante esta etapa fue presidente de la Asociación de Estudiantes de Medicina y Director de la revista de dicha asociación.

En 1918 se trasladó a Matanzas y obtuvo, por oposición, en ese mismo año, la cátedra de Anatomía, Fisiología e Higiene de la Escuela Normal, la cual ocupó durante cuarenta y cinco años, e igualmente desempeñó el cargo de director de la aludida escuela. Asimismo, fue Profesor de Anatomía Artística en la Escuela Provincial de Artes Plásticas de Matanzas.

Participó en diferentes eventos y congresos, como la Conferencia Regional Iberoamericana del Rotary International, en 1936, en la Convención Constituyente Cubana y en el Segundo Congreso Mundial de la Paz, en Varsovia, en 1950. De igual manera, fue miembro de importantes corporaciones, como la Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de La Habana, institución en la que entró como Académico Correspondiente, en 1942; su trabajo de ingreso fue “Condrodisplasia hereditaria deformante”. Recibió distinciones de sociedades radiológicas extranjeras.

Después del Triunfo de la Revolución, en 1959, se incorporó a diversas actividades, como a la Campaña de Alfabetización, en 1961, enseñando Higiene Rural y Primeros Auxilios, en el Campamento Varadero.

Dentro de sus mayores aportes, se encuentran las obras de texto que elaboró, relacionadas con la enseñanza de Educación para la Salud, Ciencias de la Naturaleza y Biología Humana, así como libros de cuentos, viajes y cuadernos, algunos realizados en colaboración con su hija, y otros con el doctor José Francisco Wegener González. Reveló un concepto amplio de la docencia y la maestría pedagógica. De esta última, tuvo gran dominio y poseyó profundos conocimientos y habilidades pedagógicas, en la cual trabajó con vocación extraordinaria.

Falleció en la ciudad de Matanzas el 27 de febrero de 1978.

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